¿En que manos estamos?...
Estamos en un mundo en el que la mejor defensa contra el poder del enemigo se ha convertido en llenar nuestros propios arsenales con un sin fin de armas, con el fin de meter miedo al otro de que cualquier conflicto generalizado supondría el fin del planeta . El problema es que esas armas están en casi todas las ocasiones en manos de inútiles, desequilibrados e irresponsables.