Principios estéticos del zen (7/7).
El último de estos siete principios es la tranquilidad necesaria para que puedan surgir los otros seis. Está relacionado con la paz interior que permite el equilibrio y el estado meditativo que buscamos desde el inicio de toda práctica. Antes de comenzar cualquiera de las artes zen es imprescindible tomarnos un tiempo para entrar en ese estado de paz, dejando a un lado cualquier situación o pensamiento que suponga inquietud. Sólo con una mente despejada donde los pensamientos no intervienen, podemos encontrar la paz necesaria para sentir la liviandad del alma.
Con la mente como un estanque quieto, la piedra lanzada producirá ondas perfectas.
"Con la mente como un estanque quieto, la piedra lanzada producirá ondas perfectas"
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¡Y es así !
EliminarUn abrazo, Gorka.
Precioso. Con tu permiso lo comparto en el musgo.
ResponderEliminarUn saludo
Estupendo, Ane.
EliminarUn abrazo.
Gracias por permitirme compartir, Hosshin. Este blog tiene un enorme valor.
EliminarGasshô :)
Querido amigo, muy interesante y encantadora esta serie que gotica a gotica has ido publicando .
ResponderEliminarMuchas gracias por compartirlo
Un abrazo
j
Gracias "J".
EliminarLas buenas cosas y los buenos momentos son para compartirlos. Y sobre todo ahora que cada vez, parece, escasean más.
Un abrazo.