En el cielo hindú existe un árbol llamado Kalpataru  (o árbol de los deseos).  Un cansado viajero llegó por azar y se sentó debajo del árbol.  - "Estoy tan hambriento  -pensó- que sí hubiera alguien por aquí le pediría comida"   En ese momento la comida se materializó delante de el. Cuando hubo comido le entró el sueño, y pensó:  -"Sí hubiera una cama aquí..."  Y la cama apareció. Pero tumbado en la cama comenzó a pensar:  - "¿Que está sucediendo? No veo a nadie, pero la comida y la cama han aparecido. ¡Aquí hay fantasmas!"  De repente aparecieron los fantasmas. Entonces se asustó y pensó:  -"Ahora me matarán"  ¡Y lo mataron!    En la vída es igual:  Sí piensas en fantasmas, aparecerán. Si piensas en enemigos, los tendrás. Sí piensas en amigos aparecerán. Sí odias, el odio brotará. Sí amas, el amor surgirá a tu alrededor.
 
Miedo al cambio. Miedo a perder quizá. A perder lo que imaginamos ser. Lo que pretendemos tener. Cambiar es siempre perder algo, como caminar implica dejar atrás. Y eso nos da miedo. Incluso a perder el miedo tenemos miedo.
ResponderEliminarUn abrazo grande
Todo lo que llega a nuestra vida y, de hecho, todo lo que somos, no es más que una realidad transitoria. Cuando esto no se comprende, surge el apego y con este el miedo a la pérdida.Es uno de los temores más fuertes porque se convierte en un círculo vicioso. Cuanto más apego, más miedo; y cuánto más miedo, más apego. Dejar fluir y aceptar que todo es transitorio nos hace menos temerosos.
EliminarUn abrazo Momiji.