En el cielo hindú existe un árbol llamado Kalpataru (o árbol de los deseos). Un cansado viajero llegó por azar y se sentó debajo del árbol. - "Estoy tan hambriento -pensó- que sí hubiera alguien por aquí le pediría comida" En ese momento la comida se materializó delante de el. Cuando hubo comido le entró el sueño, y pensó: -"Sí hubiera una cama aquí..." Y la cama apareció. Pero tumbado en la cama comenzó a pensar: - "¿Que está sucediendo? No veo a nadie, pero la comida y la cama han aparecido. ¡Aquí hay fantasmas!" De repente aparecieron los fantasmas. Entonces se asustó y pensó: -"Ahora me matarán" ¡Y lo mataron! En la vída es igual: Sí piensas en fantasmas, aparecerán. Si piensas en enemigos, los tendrás. Sí piensas en amigos aparecerán. Sí odias, el odio brotará. Sí amas, el amor surgirá a tu alrededor.
Por que es muy humano inquietarse ante lo desconocido, representado por la muerte amigo Confucio, deberias saberlo, no es ningun misterio.
ResponderEliminarGracias "anónimo". Efectivamente es muy humano inquietarnos ante lo desconocido.
ResponderEliminarNo tan desconocido, ¿en qué estado estabas antes de nacer y por toda la eternidad antes del nacimiento?
ResponderEliminarNo parece un estado tan preocupante...
Un cordial saludo
Gracias por tu comentario amigo "Do"
ResponderEliminar